Twitter está planeando probar nuevas herramientas relacionadas con la privacidad, destinadas a dar a los usuarios un mayor control sobre sus listas de seguidores y sobre quién puede ver sus publicaciones y gustos, en un esfuerzo por hacer que la gente se sienta más cómoda interactuando y compartiendo en la red social.
Las herramientas están relacionadas con lo que los directivos de Twitter denominan «privacidad social», es decir, cómo los usuarios gestionan su reputación e identidad en el servicio. Esto incluye información como la lista de seguidores de una persona, los tuits que le gustan y si sus cuentas son públicas o privadas.
El equipo de privacidad de la empresa está trabajando en varios productos para aplacar esta incertidumbre de los usuarios. Algunos de ellos se probarán en breve, y otros están ahora mismo en fase de concepto.
Tweets archivados: Twitter podría permitir a los usuarios ocultar los tweets antiguos después de un tiempo determinado. Los tweets serían visibles para el titular de la cuenta, pero no para nadie más.
Eliminación de seguidores: los usuarios pronto podrán eliminar seguidores. Actualmente, esto solo es posible bloqueando a alguien. Twitter tiene previsto probar esta función a partir de este mes.
Ocultar los tuits que te han gustado: los usuarios podrán establecer quiénes -todos, solo sus seguidores o grupos seleccionados- pueden ver los tuits que les han gustado. No hay un plazo para probar esta función.
Abandonar las conversaciones: los usuarios tendrán la opción de retirarse de una conversación pública en Twitter. Actualmente, solo la persona que envía un tuit puede elegir a quién mencionar. Twitter tiene previsto probar esta función antes de que acabe el año.
Según una investigación interna, muchos de los usuarios de Twitter no entienden los aspectos básicos de la privacidad, como por ejemplo si su cuenta es visible públicamente, explica Svetlana Pimkina, investigadora de la empresa con sede en San Francisco. Esos usuarios participan menos en Twitter porque no saben lo que otras personas podrán ver sobre ellos. «Cuando no se satisfacen las necesidades de privacidad social, la gente limita su autoexpresión», explica Pimkina. «Se retiran de la conversación». Twitter empezará a pedir a los usuarios que revisen si sus cuentas son públicas o privadas a partir de septiembre.